Informaciones Psiquiátricas - Primer trimestre 2008. Número 191

Programa de fomento de ejercicio físico para disminuir la ansiedad en pacientes psiquiátricos

 

Carolina Miguel García

Residente Especialidad Enfermería Salud Mental. 7.a promoción 2006-2007.

 

Recepción: 14-06-07 / Aceptación: 04-02-08

 

RESUMEN

La ansiedad es un estado del organismo que todos hemos experimentado infinidad de veces ante muchas y variadas situaciones (antes de un examen, en una entrevista de trabajo, cuando esperamos resultados médicos...). Las sensaciones que produce son en general desagradables y aunque causen malestar, tienen muchas veces una función adaptativa. Cuando los niveles de ansiedad y su duración son excesivos pueden convertirse en trastorno y debilitar, e incluso incapacitar, a la persona que los padece1.

A lo largo de mis rotaciones asistenciales dentro de la Especialidad de Enfermería de Salud Mental he podido percibir como los pacientes con patología psiquiátrica acusaban elevados niveles de ansiedad y como ésta les incapacitaba, e incluso cómo les impedía realizar de una manera habitual las actividades de la vida diaria.

De esta observación surge la idea de mi proyecto, desarrollar un programa para prevenir, o bien reducir el nivel de ansiedad en pacientes psiquiátricos.

Para realizar el programa, me he basado en una de las principales taxonomías, que forman parte de la estandarización de cuidados, internacionalmente reconocida: La Clasificación de Intervenciones de Enfermería (NIC) tomando como referencia la siguiente intervención:

 

0200 Fomento del ejercicio2

 

A partir de esta intervención, aplicando las actividades que ésta incluye pretendo disminuir el nivel de ansiedad en pacientes psiquiátricos aprovechando los beneficios para la salud de la práctica de un ejercicio físico regular.

 

Palabras clave

Ansiedad, salud mental, ejercicio físico, pacientes psiquiátricos, intervención de enfermería.

 

INTRODUCCIÓN

Existen múltiples definiciones del concepto de ansiedad. Entre las más relevantes se encuentran:

– «Respuesta inicial a una amenaza psíquica» (Peplau 1963)3, 4, 5.

– «Respuesta defensiva del organismo ante una situación que es vivida como peligrosa» (Caplan 1980)6, 7, 8.

– «Vaga sensación de malestar o amenaza, acompañada de una respuesta autonómica (cuyo origen con frecuencia es desconocido para el individuo); sentimiento de aprensión causado por la anticipación de un peligro. Es una señal de alerta y advierte de un peligro inminente y permite al individuo tomar medidas para afrontarla» (Nanda 1995)9.

Una de las dificultades detectada con relativa frecuencia, es la ambigüedad del uso del término ansiedad y la observación de que se citan indistintamente expresiones como ansiedad, estrés, miedo, tensión, angustia, etc. No obstante, aunque no siempre aparecen claramente diferenciados, sí que se aprecia en todos ellos un significado con claro exponente negativo.

Como he comentado anteriormente, y según los textos consultados, la ansiedad se experimenta por todas las personas a lo largo de la vida. Sin embargo, en algunas se vuelve tan problemática, que interfiere en la capacidad de funcionar de una manera efectiva o dificulta el disfrute de la vida cotidiana. Se ha estimado, que casi el 25% de la población adulta ha experimentado, en algún momento, síntomas característicos de los diversos trastornos de ansiedad10.

En cuanto a su sintomatología, la ansiedad, comúnmente, se acompaña de una serie de reacciones diversas como pueden ser:

Síntomas somáticos

– Cardiovasculares: taquicardia y palpitaciones (pueden asociarse a dolores precordiales y en momentos en que estos síntomas se exacerban, como por ejemplo durante una crisis de angustia, puede llegar a añadirse el miedo a morir de una ataque cardíaco).

– Respiratorios: taquipnea, respiración superficial y sensación de ahogo.

– Gastrointestinales: Alteraciones del tránsito intestinal en forma de diarreas, estreñimiento o colon irritable. Dolor abdominal, dispepsia, flatulencia, bolo esofágico, pirosis y sensación de distensión abdominal.

– Urinarios: micciones frecuentes, tenesmo vesical.

– Neurológicos: cefaleas, síndromes vertiginosos, síncopes.

– Neurovegetativos: sudoración profusa, temblor, hormigueos, parestesias y enrojecimiento o palidez en cara y cuello.

– Trastornos del sueño: insomnio de conciliación, despertares frecuentes y sensación de no haber descansado6.

Síntomas psicológicos

La ansiedad puede presentarse con crisis, de forma brusca y episódica (como sucede en el trastorno de pánico). También puede presentarse sin crisis, de forma persistente y continua (como sucede en el trastorno de ansiedad generalizada) o bien como consecuencia de una fuerte e identificable situación de estrés (como sucede en el caso del trastorno por estrés postraumático). Igualmente la ansiedad se provoca ante estímulos temidos por el sujeto (como sucede en los trastornos fóbicos) o bien cuando al individuo le asaltan ideas recurrentes (como en el trastorno obsesivo-compulsivo)6.

Existen múltiples sistemas de clasificación de la ansiedad y de los trastornos relacionados con ésta. Entre las principales clasificaciones clínicas se encuentran: DSM-IV-R11 y CIE-1012 y de notoria relevancia son también los diagnósticos de enfermería (NANDA). En esta última taxonomía, aparte de un diagnóstico denominado propiamente ansiedad, se pueden encontrar varios diagnósticos que la presentan, bien sea dentro de sus propias características definitorias o bien incluyéndose entre sus factores de riesgo, como pueden ser, por ejemplo: Diagnósticos referidos a ansiedad: Ansiedad, Temor, Ansiedad ante la muerte. Diagnósticos relacionados con ansiedad: Afrontamiento inefectivo, Deterioro de la interacción social, Aislamiento social y Deterioro del patrón del sueño9, 13, 14, 15.

En consecuencia, la ansiedad, además de ser la base de los trastornos de ansiedad en sí, esta asociada a distintas alteraciones, denominadas tradicionalmente neuróticas y también puede encontrarse asociada a los trastornos psicóticos, ya que los mismos síntomas de patologías como puede ser, por ejemplo, la esquizofrenia, pueden causar ansiedad, a través de la presencia de alucinaciones, delirios autoreferenciales, etc... Todo lo cual, puede conducir a la hipótesis de que numerosos pacientes psiquiátricos, podrían beneficiarse de la prevención y/o reducción de su nivel de ansiedad mediante la aplicación de un programa de ejercicio físico específico, a través de la intervención de enfermería en salud mental.

En general, los diferentes tratamientos de la ansiedad incluyen, principalmente los psicofármacos, la psicoterapia y técnicas cognitivo-conductuales, entre las que se encuentra la terapia de relajación (con efectividad demostrada en múltiples ocasiones, según diversos autores)16, 17, 18. Este proyecto pretende añadir un nuevo recurso en el tratamiento de la ansiedad: El ejercicio físico, y la pretensión es implementarlo bajo las pautas de la intervención enfermera, creando un programa específico que ayude a desarrollar las actividades citadas en la intervención 0200: Fomento del ejercicio, en la taxonomía NIC2, y sea aplicable para pacientes psiquiátricos.

 

ANTECEDENTES

La historia del ejercicio físico es tan antigua como la del propio hombre y ha seguido día a día su desarrollo. Desde la prehistoria hasta nuestros tiempos el ejercicio ha ido evolucionando pero ya desde edades antiguas era considerado parte de la salud del individuo.

Las continuas demandas físicas y proyecciones en la vida diaria del ser primitivo hacían necesario que el ser humano tuviera una buena aptitud física, de manera que pudiera subsistir en el medio ambiente hostil donde vivía. Por lo tanto, es posible que la actividad física primitiva estuviera relacionada en sus inicios con actividades de supervivencia, tales como la búsqueda continua de alimento, vestimenta, albergue, protección de un ambiente hostil y la propagación de las especies.

En la Grecia clásica se le daba mucha importancia a la armonía entre lo mental y lo físico, se educaba a los niños en la gimnástica y de hecho es de ésta civilización dónde nacen los juegos olímpicos en el 776 aC19. En esta época las medidas terapéuticas estaban basadas en los ejercicios físicos, la hidroterapia y el masaje. Según Hipócrates (460-380 aC) el ejercicio, la gimnasia, el masaje y la dieta eran los medios para mantenerse saludable. En el libro de las articulaciones datado en la Grecia clásica se enumeran pautas frente a la debilidad muscular y para la mejora de las «desavenencias mentales» se recomiendan paseos y se advierte el efecto del ejercicio físico extenuante20. En la Roma Antigua se incluyó el hidromasaje, los estiramientos y los movimientos asistidos con pesos y poleas. El ejercicio moderado era considerado como valioso. Galeno proponía a sus pacientes la realización de ejercicios físicos como tratamiento de múltiples enfermedades21. El médico Celio Aureliano enunció conceptos como la hidrogimnasia, la suspensionterapia o la poleoterapia20.

En la Edad Media, con el cristianismo, comienza la decadencia de la gimnasia. Teodosio pone fin a las prácticas gimnásticas populares y suprime los juegos olímpicos (394 dC). La medicina pasó a manos de los monjes para quienes el cuidado del alma tenía preferencia sobre el cuerpo. El ejercicio físico era practicado exclusivamente por la nobleza y los primados eclesiásticos como diversión o para prepararse para la caza y la lucha. Los árabes sin embargo mantuvieron viva la medicina griega y romana y con ellos vuelve a valorarse la práctica del ejercicio físico20, 22.

Posteriormente, en el Renacimiento, se retoma el interés por la actividad muscular. En 1553 el médico Cristóbal Méndez escribe su Libro del exercicio que es el primer tratado sobre ejercicio terapéutico. En la ilustración las ideas naturalistas de numerosos filósofos ilustrados influyeron sobre los médicos de la época que reconocieron las ventajas saludables de la vida al aire libre y del ejercicio moderado. Durante el siglo XIX una gran parte del desarrollo y reactivación del interés de la gimnasia se debe a Per Henrik Ling (1776-1839), fundador del Instituto Gimnástico central de Estocolmo, cuya tesis era: «perfección física y moral» del cuidado mediante el ejercicio físico20, 22.

Ya en el siglo XX el estallido de la primera guerra mundial hizo que se incrementara el uso de ejercicios físicos para la rehabilitación en los hospitales militares. En Alemania después de la 2ª Guerra Mundial cambió la actitud hacia los ejércitos, se insistió en que se incluyeran ejercicios de relajación en programas terapéuticos20.

Actualmente existe un gran auge del ejercicio físico debido al estilo de vida estresante del mundo occidental. Es utilizado tanto con fines estéticos (disminución de peso, tonificación...) cómo terapéuticos (yoga, tai-chi...) A su vez es también una forma de evitar o reducir el empleo de psicofármacos. En conclusión, el ejercicio físico puede ser aplicado con o sin patología psiquiátrica y tanto en sentido profiláctico como terapéutico22.

 

JUSTIFICACIÓN

Según diferentes organismos oficiales tanto nacionales como internacionales, se ha constatado la eficacia del empleo del ejercicio físico como medida terapéutica en la disminución de la ansiedad y como mecanismo de protección de trastornos mentales:

La Organización Mundial de la Salud (OMS) en la Conferencia Ministerial pa-ra Salud Mental (Helsinki, 12-15 Enero 2005), reconoce que la salud mental es fundamental para la calidad de vida y productividad de las personas, las familias, la comunidad y los países. Basándose en anteriores resoluciones y en el Informe Mundial de la Salud de la OMS (2001) enfatiza la importancia y la urgencia de afrontar los retos actuales en salud mental y ofrecer soluciones basadas en la evidencia científica. También promulga la necesidad de diseñar sistemas de salud mental integrales, integrados y eficientes que cubran todas las áreas de atención a la salud mental, entre estas recomendaciones, destaca la particular atención a los trastornos de ansiedad23.

Otro organismo de máxima relevancia a nivel mundial es la International Society of Sport Psychology, y al respecto del tema que nos ocupa destaca la siguiente consideración: «El proceso de ejercicio, ya sea de corta o larga duración, causa un bienestar mental y mejoría psicológica. La actividad física es causante de una mejora en la autoestima que produce beneficios de hipertensión, osteoporosis, crisis diabéticas, y varios trastornos psiquiátricos. Es una forma efectiva como otras formas de psicoterapia para el paciente depresivo. Los beneficios individuales del ejercicio incluyen:

a) Reducción de la ansiedad-estado.

b) Reducción de los niveles mínimos y moderados de depresión.

c) Reducción de los niveles de estrés.

d) Reducción de los niveles de neurosis.

e) Colabora en el tratamiento de la depresión severa.

f) Beneficia psicológicamente a ambos sexos y a todas las edades24

En el caso del estado Español, el Ministerio de Sanidad y Consumo, promueve a través de la Guía de la Actividad Física la utilización del ejercicio físico por sus numerosos beneficios. En Concreto en el apartado «beneficios de la actividad física» se enumeran las ventajas de la práctica de ejercicio físico tanto a nivel físico, psicológico, como social25.

Teniendo en cuenta la relevancia de los organismos anteriormente citados y la importancia de las recomendaciones dictadas por éstos, así como las aportaciones científicas procedentes de diversos autores, la elección del presente tema se ha dado en el convencimiento de que el programa de ejercicio físico aplicado en personas con trastorno mental, está notable y visiblemente avalado y ha de tener indudables repercusiones positivas para este tipo de pacientes. De las revisiones bibliográficas efectuadas, a modo de ejemplo, se destacan algunas afirmaciones como las de los siguientes autores:

Para Palenzuela, D., Gutiérrez Calvo, M y Avero, P. «El ejercicio físico regular actúa como un mecanismo de protección contra la depresión en los jóvenes»26.

Para García Llopis, A. «El ejercicio físico disminuye la ansiedad y la tristeza, aumenta la autoestima y favorece las relaciones sociales»27.

Para Becker, B. «Una sesión de ejer-cicios aeróbicos es suficiente para reducir la ansiedad en individuos ansiosos y es un factor higiénico importante a la hora de prevenir la aparición de los síntomas de la depresión»28.

Para Díaz Rodríguez, L. et, al. «El ejercicio físico aeróbico ha resultado una estrategia para mejorar el bienestar psicológico en pacientes VIH+, mejorando su calidad de vida, la depresión, la ansiedad y el manejo del estrés»29.

Finalmente, se destaca que «la necesidad de aplicar programas de ejercicio físico en pacientes psiquiátricos, ha sido reconocida también por Oliveria, E. y Alves, M.30 al recoger las declaraciones en entrevistas que con motivo de su estudio, realizaron enfermeros de salud mental.

En conclusión, la importancia y repercusión ventajosa del ejercicio físico para personas sanas y, muy especialmente, para personas afectas de trastornos psiquiátricos, ha sido reconocida como muy positiva desde diferentes instancias, organismos y autores31, 32, 33, de los que aquí se ha recogido constancia con el interés de argumentar y justificar la aplicación beneficiosa de un programa de ejercicio físico para disminuir la ansiedad en pacientes psiquiátricos, cómo intervención específica de enfermería de Salud Mental.

 

HIPÓTESIS

Teniendo en cuenta que la ansiedad es padecida por la población en general, se resienten de ella especialmente las personas vulnerables y que afecta en mayor grado a los pacientes psiquiátricos. Desde Enfermería de Salud Mental, a través del presente proyecto se propone una alternativa preventiva y terapéutica consistente en un programa de intervención y fomento de ejercicio físico para pacientes psiquiátricos, por lo que se plantea la siguiente hipótesis:

– Que el programa de fomento y realización de ejercicio físico, logrará disminuir el nivel de ansiedad en determinados* pacientes psiquiátricos ingresados en el Hospital de día de Granollers.

* Según aconseje su estado de salud y bajo el criterio médico

 

OBJETIVOS

General

– Disminuir el nivel de ansiedad en pacientes psiquiátricos.

Específicos

– Que los pacientes conozcan los beneficios del ejercicio a nivel físico.

– Que los pacientes conozcan los beneficios psicológicos del ejercicio físico.

– Que los pacientes experimenten los beneficios que el ejercicio físico les re-porta socialmente.

– Que la práctica del ejercicio físico sea integrada en sus hábitos diarios.

 

MATERIAL Y MÉTODOS

Contexto

El estudio se desarrollará en el Hospital de día de Granollers perteneciente al Complejo asistencial en Salud Mental (CASM) Benito Menni.

La recogida de datos será realizada por la enfermera Especialista en Salud Mental.

El desarrollo del programa de fomento del ejercicio físico se realizará en la sala de grupo del centro, en la consulta de enfermería y en el patio del CASM de Benito Menni en Sant Boi.

Población y muestra

La población del estudio de este proyecto de investigación está constituida por los pacientes ingresados en el Hospital de día de Granollers, que en sus planes de cuidados, enfermería objetive la necesidad de reducir o prevenir la ansiedad.

Criterios de inclusión

– Edad: Mayor de 18 años.

– Pacientes psiquiátricos ingresados en el Hospital de día de Granollers.

– Que enfermería objetive en sus planes de cuidados la necesidad de reducir o prevenir la ansiedad.

– Deseo de participar voluntariamente.

– Estables psicopatológicamente.

Criterios de exclusión

– Diagnosticados de algún tipo de Trastorno de Conducta Alimentaria.

– Trastorno mental grave descompensado psicopatológicamente.

– Desaconsejado por prescripción facultativa.

Variables

– Variable independiente:

1. Programa de fomento del ejercicio físico.

2. Edad.

3. Sexo.

– Variable dependientes:

1. Nivel de ansiedad.

Instrumentos

  • Escala de Hamilton para Evaluación de la ansiedad (HRSA)

La escala de Hamilton para la ansiedad es una escala de heteroevaluación propuesta por Hamilton en 1959, que explora el área del estado de ansiedad.

La HRSA representa el tipo de escala constituida por categorías de síntomas mediante los cuales se explora la ansiedad, la tensión, los síntomas neurovegetativos y los somáticos. La escala consta de 14 cuestiones cada una con una puntuación de 0 a 4, donde 0 es ausente, 1 leve, 2 moderado, 3 grave y 4 muy grave (anexo I).

La evaluación se realiza mediante una entrevista voluntaria, preguntando al paciente acerca de los síntomas aparecidos.

Diseño de la Investigación

Se trata de una investigación Empírica con Diseño Experimental. Se realizará una asignación aleatoria de pacientes y la existencia de un grupo control para así realizar una comparación y medir si se cumple la hipótesis.

Procedimiento

Se decidirá en reunión con el equipo interdisciplinar quienes son los usuarios del Hospital de día candidatos a poder recibir el programa de fomento del ejercicio para disminuir la ansiedad.

Se informará a los pacientes que vayan a formar parte en el programa en que consiste éste y cómo se va a desarrollar, también se les informará de la absoluta voluntariedad a participar. Se les entregará individualmente una hoja informativa y la enfermera especialista en Salud Mental irá explicándoles su contenido y se prestará a todas las dudas que la información dada pueda suscitar (anexo II).

Se les entregará un modelo de formulario de consentimiento informado que deberán cumplimentar (anexo III).

A cada paciente que participe en el programa, antes de iniciarlo se le pasará la escala de Hamilton para la ansiedad, para conocer así el nivel de ansiedad inicial de cada paciente y poderlo contrastar después con el nivel de ansiedad posterior, al terminar el programa de intervención (anexo I).

También antes y después de cada sesión a cada paciente se le pasará una encuesta elaborada por la autora, para recoger sus expresiones y poder valorar cómo se encuentran los pacientes antes y después de la sesión y si aprecian alguna diferencia, etc. (anexo IV, V). En resumen, el contenido de esta encuesta, se basa en calibrar el resultado al que pretendo llegar: Autocontrol de la Ansiedad, que es uno de los posibles resultados que se pueden obtener y encontrar en la Clasificación de resultados de enfermería, dado que, a mi juicio, este resultado es muy adecuado para el alcance de estos pacientes y la evaluación de este Programa34.

Limitaciones del estudio

La puesta en marcha y la evaluación de este programa están limitadas a pérdidas de seguimiento de la muestra. Se excluirían los pacientes que abandonaran o que pasaran a no cumplir los criterios de inclusión una vez estuviera desarrollándose el programa (por ejemplo si sufrieran una descompensación psicopatológica).

Análisis de los datos

Los datos serán obtenidos y recogidos por la Enfermera Especialista en Salud Mental que llevará a cabo el Programa de Fomento del Ejercicio para disminuir la Ansiedad en Pacientes Psiquiátricos. Se introducirán en el programa estadístico SPSS donde serán tabulados y analizados y así se podrá valorar la diferencia entre los niveles de ansiedad existentes antes y después de la aplicación del programa, De este modo se obtendrán los resultados y conclusiones que se prevén en el diseño de este proyecto de investigación.

 

CRONOGRAMA

El Programa de Fomento del Ejercicio Físico tiene una duración aproximada de 10 semanas. En este tiempo se pretende Fomentar el Ejercicio Físico entre los pacientes de tal manera que pueda ayudarles a disminuir los niveles de ansiedad.

En la primera semana se trata de establecer reuniones con el equipo interdisciplinar y con los profesionales referentes de los pacientes para así determinar qué pacientes se podrían beneficiar de la aplicación de este Programa, teniendo en cuenta los criterios de inclusión y exclusión.

Una vez determinados quienes son los pacientes que podrían participar en el estudio, en la segunda semana planteo una actividad lúdica (como podría ser la visita al Parque Natural del Montseny o al Parque Güell de Barcelona) donde la Enfermera Especialista en Salud Mental junto a un/a auxiliar de enfermería acompañan a los pacientes. De este modo establezco una relación de mayor cercanía con ellos y en un entorno natural, con un marco diferente al del Hospital les explico cual es la intención y la finalidad del estudio. Esa misma semana y ya en el Hospital de día, preveo realizar visitas individuales dónde les entrego la hoja informativa (anexo II) y se la explico detalladamente, al igual que se solventan todas las dudas que presenten respecto al estudio. Una vez se hayan aclarado todas sus dudas, se les entregaría la petición del consentimiento informado (anexo III).

En la tercera semana iniciaríamos el Programa de Fomento del Ejercicio.

Inicialmente, se pasaría individualmente:

  • Escala de Hamilton para Evaluación de la ansiedad (HRSA)

Posteriormente, tras haber realizado dicha escala, iniciaríamos el Programa: con una exposición de una sesión Power Point (anexo VII) sobre los tipos de ejercicio y los beneficios de éste (físicos, psicológicos y sociales). En esta exposición se introducen preguntas, que los pacientes deben contestar y se van anotando sus respuestas en una pizarra. Se realiza como una lluvia de ideas de forma que ellos puedan exponer las sensaciones que la práctica de ejercicio les ha conllevado, que deportes han practicado, etc. Esta sesión se realizaría en la sala Polivalente del Hospital de día y tendría una duración de unos 60 minutos.

En la cuarta semana empezaríamos la práctica del ejercicio físico. Durante las sesiones prácticas de ejercicio físico se trabajarían las actividades descritas en la intervención 0200 Fomento del ejercicio2. Para ello contaríamos con las instalaciones deportivas del CASM Benito Menni en Sant Boi (anexo VIII). Realizaríamos 2 sesiones semanales de 45 minutos cada una. En esta primera semana práctica nos centraríamos en el Baloncesto (juegos derivados de este deporte). Hay que recordar que antes y después de cada sesión de la práctica de ejercicio, se les pasaría a los pacientes la encuesta creada por la propia autora del proyecto para valorar así su estado y sus inquietudes más frecuentemente (anexo IV, V).

En la quinta semana el deporte en torno al cual girarían los ejercicios sería el fútbol. De nuevo serían dos sesiones semanales de 45 minutos.

La sexta y séptima semanas se basaría en la aplicación de deportes como: voleibol, aeróbic, balonmano y sugerencias que dentro del grupo hayan surgido y que la Enfermera Especialista encuentre que sean aplicables y adecuados.

En la octava semana, una vez finalizada la práctica de ejercicio, se concluiría el Programa de nuevo con una salida lúdica en la que se pudiera practicar senderismo en un entorno natural (Parque natural del Montseny). Allí se plantearía si han encontrado beneficios en la práctica del ejercicio tanto a nivel físico, como psicológico, como social y se les animaría a continuar con la práctica fuera del entorno del Hospital de día. Plasmaríamos estos datos en una encuesta final también elaborada por la autora (anexo VI).

En esa semana de nuevo se les pasaría:

  • Escala de Hamilton para Evaluación de la ansiedad (HRSA)

Para así objetivar si han disminuido los niveles de ansiedad según este referente.

La novena y décima semana, con la ayuda de un estadístico, se trataría de analizar los resultados obtenidos mediante la base de datos SPSS.

 

RECURSOS Y PRESUPUESTO

Recursos humanos

El programa se llevará a cabo por una DUE Especialista en Salud Mental. Trabajará a jornada completa 40 horas semanales. Puesto que la duración del Programa son 10 semanas (2 meses y medio): 4250 euros.

Se necesita una auxiliar de enfermería a tiempo parcial, 20 horas semanales: 1500 euros.

Se necesitará la colaboración parcial de un estadístico: 900 euros.

Recursos materiales

1. Sala polivalente del Hospital de día (anexo IX).

2. Consulta de enfermería del Hospital de día (anexo X).

3. Ordenador, cañón de PC para la presentación en Power Point, pizarra.

4. Instalaciones deportivas: campo de baloncesto con canastas y campo de fútbol con porterías. (Los anteriores son cedidos por CASM Benito Menni.)

5. Material de oficina: bolígrafos, rotuladores, folios, carpetas, fotocopias...: 500 euros.

6. Material deportivo: 3 balones oficiales de baloncesto, 2 balones reglamentarios de futbol, 2 de voleibol y 2 de balonmano, equipo de música portátil, cds música: 400 euros.

7. Transporte para realizar las distintas actividades para todos los pacientes y el personal 20 desplazamientos ida
y vuelta en transporte público. Bonotren de 3 zonas con 10 viajes: 14,60 euros. Se necesitarían aproximadamente 40 bonos (20 personas que realizarían 20 desplazamientos, 400 viajes): 600 euros.

TOTAL: 8150 euros.

 

RELEVANCIA Y APLICABILIDAD DE RESULTADOS

Si se confirmara la hipótesis del estudio, el Programa de Fomento del Ejercicio para disminuir la Ansiedad en Pacientes psiquiátricos, podría aplicarse tanto al resto de Hospitales de día del CASM Benito Menni, como en otros Centros de día de la misma empresa.

 

AGRADECIMIENTOS

A mi Unidad Docente y a todos los profesionales que la componen por haberme enseñado tanto durante este año.

Al equipo del Hospital de día de Granollers por su gran acogida y en especial a María Jesús Jiménez por todo lo que he aprendido de ella...

A la persona que más me ha ayudado y animado en la realización de este proyecto: Pilar Sabater por su valía como profesional y como persona.

A mi familia por estar siempre ahí, apoyándome.

En especial este proyecto está dedicado a José Miguel.

 

BIBLIOGRAFÍA

1.   Paz Enríquez S. El psicólogo en casa. Madrid: Libsa; 2004.

2.   Bulechek GM, McCloskey Dochterman J. Clasificación de Intervenciones de Enfermería (NIC). 4.a ed. Madrid: Mosby; 2005.

3.   Peplau H. A Working Definition of An-xiety. In Burd S, Marshall M (eds): So-me Clinical Approaches to Psychiatry Nursing. New York: Macmillan; 1963.

4.   Peplau H. Interpersonal Relations in Nursing. New York: GP Putnam’s Sons; 1952.

5.   Johnson BS. Enfermería de Salud Men-tal y psiquiátrica. Vol. 2. 4.a ed. Madrid: McGraw-Hill. Interamericana; 2000.

6.   Megías-Lizancos F, Serrano Parra MD. Enfermería en psiquiatría y salud mental. 2.a ed. Madrid: Difusión avances de enfermería; 2002.

7.   Caplan G. Principios de Psiquiatría preventiva. Buenos Aires: Piados; 1980.

8.   Kaplan HI, Sandock BJ. Tratado de Psiquiatría. Barcelona: Ediciones Científicas y Técnicas; 1989.

9.   North American Nursing Diagnosis Association. Diagnósticos enfermeros. Definiciones y clasificación. 2003-2004. Madrid: Elseiver; 2003.

10.    Gerrig RJ, Zymbardo PG. Psicología y vida. 17.a ed. México: Pearson Educación; 2005.

11.    DSM-IV®. Guía de uso. Barcelona: Masson; 1997.

12.    CIE 10. Décima Revisión de la Clasificación Internacional de las Enfermedades: Trastornos Mentales y del Comportamiento. Madrid: Meditor; 1992.

13.    Carpenito LJ. Diagnósticos de enfermería: Aplicación a la práctica clínica. 9.a ed. Madrid: McGraw-Hill Interamericana. 2002.

14.    Luis MT. Los diagnósticos enfermeros: Revisión crítica y guía práctica. 7.a ed. Madrid: Masson; 2006.

15.    Johnson M, Bulecheck G, McCloskey Dochterman J, Maas M, Moorhead S. Diagnósticos enfermeros. Resultados e Intervenciones. Interrelaciones NANDA, NOC y NIC. Madrid: Mosby; 2002.

16.    Davis M, McKay M, Eshelman ER. Técnicas de autocontrol emocional. Barcelona: Martínez Roca; 1985.

17.    Herbert Benson MD. La relajación una terapia imprescindible para mejorar su salud. Barcelona: Giraldo; 1986.

18.    Departament of Medical, Clinical and Experimental Psychology, University of Maastrich, P.O. Box 616, NL-6200 MD, Maastrich, The Netherlands. Cognitive therapy versus applied relaxation as treatment of generalized anxiety disorder. Behavior Reseach and Therapy; vol. 41, issue 6, Junio 2003, pág. 633-646.

19.    Lopategui Corsino E. Historia de la educación física. [Consultado el 20 de febrero del 2007] Disponible en: http://www.saludmed.com/EdFisica/HistEdFi.html.

20.    Medicina física y rehabilitación. Wi-kipedia. [Consultado el 18 de febrero del 2007] Disponible en: http://es.wikipedia.org/wiki/Medicina_f% C3%ADsica_y_rehabilitaci%C3%B3n

21.    Alonso López R, Pérez Sánchez A, Peñate Recio P. Utilidad del ejercicio físico sincinético en la reeducación motora del hemipléjico neurotransplantado. Revista digital. Buenos Aires: n.o 38. Julio del 2001. [Consultado el 20 de febrero del 2007] Disponible en: http://www.efdeportes.com.

22.    Puyades X. Apuntes de la asignatura: Història de l’educació física i l’Esport. 1.er curso de Ciències de l’Activitat Física i l’Esport (CAFE). Barcelona: Universitat Ramon Llull; 2004-2005.

23.    Organización Mundial de la salud. Conferencia ministerial para salud mental. Plan de acción en Salud Mental Helsinki. Helsinki: OMS; 2005. [Consultado el 7 de marzo del 2007] Disponible en: http://www.asoc-aen.es/web/docs/Helsinki05.pdf.

24.    International Society of Sport Psychology (1992) Physical activity and psychological benefits. A position statement. International Journal of Sport Psychology, 23, 86-91. [Consultado el 7 de marzo del 2007] Disponible en: http://www.deportesalud.com/deporte-salud-deporte-y-estres.html.

25.    Ministerio de sanidad y consumo. Guía de ejercicio físico. [Consultado el 14 de julio del 2006] Disponible en: http://www.msc.es/ciudadanos/proteccion Salud/adolescencia/actividad_fisica.htm.

26.    Palenzuela DL, Gutiérrez Calvo M, Avero P. Ejercicio físico regular como un mecanismo de protección contra la depresión en jóvenes. Psicothema. 1998; vol. 10, n.o 1: 29-39.

27.    García Llopis AM. Programa de promoción de actividad física en el anciano. Metas enferm. 2002; V(50): 56-60.

28.    Becker B. El efecto del ejercicio y el deporte en el área emocional. Revista digital. Buenos Aires: n.o 12. Diciembre 1998. [Consultado el 21 de febrero del 2007]. Disponible en: http://www.efdeportes.com.

29.    Díaz L, Arroyo M, Ruiz C, Pradas F. Ejercicio físico aeróbico: estrategia para mejorar el bienestar psicológico en pacientes VIH1. Evidentia. 2005; enero-abril; 2(4). [Consultado el 14 de febrero del 2007] Disponible en: http://www.index-f.com/evidentia/n4/96articulo.php [ISSN: 1697-638X].

30.    Oliveira E, Alves M. Factores que influyen en los enfermeros para usar la actividad física en la asistencia a pacientes psiquiátricos. Esc Enferm USP-Bra-. 2003; sep. 37(3): 97-105. [Consultado el 14 de febrero del 2007] Disponible en: http://www.ee.usp.br/revista/rev_ee.htm.

31.    Sánchez García P. El ejercicio y la actividad física en el enfermo mental crónico. Terapia ocupacional. 2003; abr. 31: 10-13.

32.    Akandere M, Tekin A. Efectos del ejercicio físico sobre la ansiedad. PubliCE Standard. 2005; Pid:478. [Consultado el 19 de febrero del 2007.] Disponible: http://www.udeportes.cl/secciones/salud/documentos/ansiedadyejercicio.doc

33.    Guimón J. Eficacia de las terapias en salud mental. Bilbao: Descleé de Brouwer; 2004.

34.    Moorhead S, Johnson M, Maas M. Clasificación de resultados de enfermería (NOC). 3.a ed. Madrid: Mosby; 2005.

35.    Comino J. Programa de psicomotricidad llevado a cabo en el Hospital de día de Granollers.

 

<< volver