Informaciones
Psiquiátricas
2016 - n.º 225
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con esta idea Foulkes y Elías han demostrado
de forma inequívoca que esta división es es-
tructuralmente imposible, ya que el proceso
del desarrollo psíquico se realiza dentro de
un entorno sociológico cuya estructura e in-
quietudes están necesariamente involucradas
desde el principio e impregnan la psique indi-
vidual a todos los niveles. Una persona con-
creta nace en un entorno social ya existente,
por lo que su “yo” necesariamente debe ser
construido a partir de un pre-existente “no-
sotros”. Este “nosotros” solo puede existir en
relación con algo designado como “no-noso-
tros” (o “ellos”) y la relación entre los dos
grupos es siempre una relación de poder. Por
tanto, las relaciones de poder pre-existentes
en el grupo donde nace el individuo determi-
nan sus posibilidades y constituyen su psi-
quismo desde el nivel más profundo.
A diferencia de la conceptualización de
Foulkes sobre el grupo como una red de co-
municaciones o sistema homogéneo que flu-
ye a través de los individuos como puntos
nodales, la introducción de la idea de poder
da como resultado la existencia de diferen-
cias potenciales que determinan que las co-
municaciones tengan más probabilidades de
fluir en unas direcciones que en otras. Por
tanto, toda comunicación es una expresión
de poder que trata de modificar la relación
con los demás.
Similar a los conceptos Freudianos de pro-
cesos primario y secundario del pensamiento,
Matte-Blanco (1988) plantea que todos nues-
tros procesos de pensamiento se componen
de una combinación de dos tipos de lógica,
simétrica y asimétrica. La lógica simétrica es
la lógica de los sueños, donde cualquier cosa
puede ocurrir por imposible que parezca. Es
una lógica que elimina las diferencias, se po-
dría decir que es la lógica de las similitudes.
Por otro lado, la lógica asimétrica es la lógi-
ca con la que estamos familiarizados, es la
lógica racional, la lógica de las diferencias.
Todo pensamiento es una interacción de si-
militudes y diferencias, y la presencia simul-
tánea de ambas lógicas tiene una influencia
sorprendente en el proceso de formación de
la identidad. Los sentidos identitarios del
“nosotros” y del “yo” se construyen aplican-
do la lógica simétrica (similitudes) a través
de la cual, las diferencias dentro del “noso-
tros” y del “yo” se hacen invisibles. En cam-
bio, los espacios entre grupos se construyen
aplicando la lógica asimétrica (diferencias) a
través de la cual, las similitudes entre gru-
pos se vuelven invisibles. Dentro del grupo
“nosotros” solo hay similitudes, mientras que
entre los grupos “nosotros” y “ellos” solo hay
diferencias.
Siguiendo a Elías, los imperativos del poder
garantizan que dentro del grupo “nosotros”
la simetrización se lleve a cabo con “lo me-
jor”, mientras que en el grupo “ellos” se rea-
lice con “lo peor”. Esta autoimagen es parte
integral del sentido del yo y por tanto hay
una diferencia fundamental en los efectos
sociológicos y psicológicos de la imagen del
“nosotros” a los dos lados de la línea diviso-
ria del poder. Se pueden ver los efectos del
poder no sólo en las mentes de los individuos
(autoestima), sino también en cómo el po-
der estructura el tipo de relaciones sociales
que son posibles para estos individuos. Estas
imágenes no son más que los contenidos del
inconsciente social, que se han constituido
de un modo invisible para determinar cómo
se experimenta el yo, el mundo y las rela-
ciones entre ellos de una forma “natural”. El
inconsciente social ha encubierto las relacio-
nes de poder.
La teoría psicoanalítica de la identidad ha
sido ampliada por una teoría grupoanalitica
en la que las relaciones de poder (encubier-
tas) se han instituido como un componente
de la identidad. Ahora podemos ver cómo las
EL INCONSCIENTE SOCIAL: UNA APROXIMACIÓN
