Informaciones
Psiquiátricas
2014-n.º 216
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CARACTERÍSTICAS Y NUEVOS RETOS EN LA ESTIMULACIÓN COGNITIVA DOMICILIARIA
la mejoría funcional (1), aumenta la satis-
facción y la percepción de recompensa y por
tanto se reduce el estrés y mejora la respues-
ta emocional y se disminuye la sensación de
carga de los cuidadores al sentirse más capa-
citados en el mejor manejo de las actividades
de la vida diaria (2).
La intervención en el familiar, o cuidador
principal, debe ir dirigida a proporcionar in-
formación y orientación a la enfermedad, pre-
venir el aislamiento social, enseñar habilida-
des para hacer frente a situaciones difíciles
y controlar las emociones, mantener rutinas
para evitar la confusión, y enseñar técnicas
que permitan evitar que se desencadenen
conductas anómalas. Aunque el cuidador
principal puede colaborar en las tareas de es-
timulación cognitiva, cabe no olvidar que el
cuidador principal no es una mano experta en
intervención cognitiva entendida ésta como
una intervención con finalidad terapéutica y
que de la misma manera que puede tener un
efecto beneficioso, pero también puede tener
efectos perjudiciales. En este sentido cree-
mos que un papel relevante que puede liderar
de forma autónoma el cuidador de demencia,
por su conocimiento del paciente, es el de
favorecer hábitos intelectuales ya adquiri-
dos previamente. Durante la última década
se han ido publicando diferentes estudios de
cohortes longitudinales en pacientes mayo-
res sin demencia y se ha constatado que el
ejercicio de hábitos intelectuales saludables,
como por ejemplo la lectura, los juegos de
mesa, o tocar instrumentos musicales prote-
gen del envejecimiento cognitivo patológico
(3-5). No obstante estos estudios tienen una
serie de limitaciones como es que las mues-
tras no han sido aleatorizadas, y las conclu-
siones a las que se llegan pueden ser debidas
a que los sujetos que genéticamente están
predispuestos a estar protegidos del dete-
rioro cognitivo pueden estar predispuestos
a tener unos mejores hábitos intelectuales.
Este dilema ha sido respondido en estudios
longitudinales con gemelos (6-7) habiéndose
objetivado que la participación en activida-
des intelectuales es un factor protector para
la demencia, en pacientes con mismo nivel
educacional.
Sobre las características más relevantes del
facilitador de hábitos intelectualmente sa-
ludables están en primer lugar el facilitador
la motivación para realizar actividades con
el enfermo y la predisposición a establecer
una rutina o planificación diaria, dosificando
y regularizando las actividades. Será impor-
tante procurar que el paciente esté tranquilo,
relajado y sereno y no mantener una actitud
directiva, comportándose como un facilita-
dor, respetando las decisiones del enfermo
y su dignidad como persona. Será determi-
nante actuar de forma flexible y cooperati-
va, adaptándose a las diferentes situaciones
o circunstancias del paciente. La actividad
deberá ser adaptada en función de sus res-
puestas y limitaciones del paciente y será
beneficioso evaluar positivamente los logros
y esfuerzos del paciente (8).
Adaptaciones del entorno
El concepto de Housing tiene su base y
fundamento en los deseos de las personas de
permanecer viviendo en su casa y su entorno
para garantizarse el mantenimiento del con-
trol sobre sus vidas y la toma de decisiones
en el acontecer cotidiano. Este es un modelo
de integración en la propia comunidad muy
afianzado en los países anglosajones que
ha permitido retrasar institucionalizaciones
no necesarias, es costo eficiente (a nivel
asistencial y sanitario) y permite mejorar el
bienestar y calidad de vida de las personas.
La calidad de vida y atención depende
de cuatro pilares básicos: de los principios
rectores de autonomía, independencia e in-
clusión social; de un modelo basado en las
capacidades preservadas; de la adaptación
